Vinos Naturales Comprometidos con la Tierra y la Tradición
Vinos Naturales con Raíces Familiares
En Devotio somos una empresa familiar dedicada a la elaboración de vinos naturales que expresan la autenticidad de nuestro territorio. Nuestra filosofía se sustenta en cuatro pilares: calidad en cada cosecha, cariño por el oficio ancestral, sostenibilidad ecológica y el esfuerzo diario para preservar métodos tradicionales. Cada paso, desde el viñedo hasta la botella, refleja este compromiso inquebrantable.
Fundados en 2020 y consolidados en 2024, nuestra bodega se ubica en Benagéber, corazón de la reserva de la biosfera del Alto Túria. Este microclima único, entre la llanura de Utiel-Requena y las montañas del interior valenciano, confiere a nuestros vinos un perfil mineral y una complejidad aromática imposibles de replicar en otras regiones. La altitud, los suelos pobres y las temperaturas extremas son aliados naturales en la creación de vinos con carácter.
Agricultura Regenerativa y Elaboración Artesanal
En Devotio, practicamos una agricultura regenerativa basada en principios que respetan y revitalizan el entorno natural:
- No labranza: preservamos la microbiología del suelo para mantener su salud y estructura.
- Cubiertas vegetales: utilizamos especies autóctonas que previenen la erosión y fomentan la biodiversidad.
- Cero químicos: evitamos plaguicidas, fungicidas y herbicidas, priorizando el equilibrio natural del ecosistema.
Gracias a estas prácticas, hemos rescatado cepas centenarias de variedades locales como la Bobal y la Garnacha Tintorera, perfectamente adaptadas al territorio. La selección manual de racimos y el control de rendimientos garantizan uvas saludables que reflejan el terroir único del Alto Túria.
En nuestra bodega, minimizamos la intervención para preservar la autenticidad de cada vino:
- Fermentaciones espontáneas: trabajamos con levaduras autóctonas que realzan los sabores naturales.
- Sin filtrados: evitamos clarificantes artificiales para conservar las texturas originales.
- Crianza en tinajas de arcilla: y barriles usados que respetan la pureza de la fruta.
El resultado son vinos naturales, vibrantes y llenos de vida, donde cada sorbo transmite la esencia del paisaje y la dedicación de quienes lo trabajan.